25 de diciembre: Feliz Navidad

“Navidad” nos dice, en primer lugar, quién es Dios. Hay algo muy metido en nosotros que nos lleva a imaginarlo omnipotente, eterno, y lejano. Sin embargo, Dios es diferente de lo que nosotros pensamos de Él. Dios se ha hecho niño, es humano, es frágil, es cercano, y es uno de nosotros. El amor de Dios no es un invento de teólogos, maestros, ni profesores. El amor de Dios es algo misterioso e increíble que ha llevado a Dios a compartir nuestra existencia. ¿No es una bendición que Dios sea así?

Navidad nos revela, al mismo tiempo, quiénes somos nosotros y todos los miembros de la familia humana. Navidad nos dice que la aventura humana no es un fracaso, que no estamos solos en manos del mal, y que Dios sufre con nosotros. Navidad también nos dice que Él nos acompaña hacia la vida eterna. Desde el desamparo del pesebre hasta el asesinato de la Cruz, Cristo no dice “ahora yo voy a hacer nuevas todas las cosas.” (Apocalipsis c. 21) ¿De quién nos puede llegar la “salvación,” si no es de Él?

***

Para reflejar: Hoy Dios nos dice algo muy importante sobre el sentido y significado de nuestra fe católica. Nuestra fe nos es precisa y solamente una doctrina en la que creemos. La Palabra de Dios no es una doctrina, sino una persona: Jesús. En Él la Palabra de Dios y sus promesas se vuelven vivas. El Hijo de Dios se hace nuestro hermano y centro de nuestras vidas. En medio de la alegría de Navidad, no olvidemos nuestra bella misión: dar a Jesús al mundo.

footer-logo
Translate »