20 de octubre: El Amor de Cristo

“Nada hay cubierto que no llegue a descubrirse, ni nada escondido que no llegue a saberse.” (Lucas 12, 1-7) Nada escapa al conocimiento de Dios. Como dice el salmo 31: “Tú me sondeas y me conoces.” Hace tiempo decíamos algo así como que Dios lo conoce y lo ve todo: lo pasado, lo presente y lo futuro y hasta los más ocultos pensamientos.

En el mismo pasaje del texto del Evangelio de San Lucas, Jesus nos explica que la mirada de Dios sobre nosotros, los humanos es una mirada que nos otorga valor: si  conoce cada pájaro en su vuelo, cada uno de nosotros vale mucho más que muchos pájaros. Tenemos su promesa de que nada podrá separarnos de su amor (Romanos 8, 38-39). Tenemos su promesa de que nunca nos dejará o desamparará (Hebreos 13, 5). Nada podrá separarnos del amor de Cristo.

En las contradicciones de una vida que quiere ser fiel al Evangelio, tenemos que seguir los caminos de Dios,  no los nuestros propios. “Oh Dios, ayúdanos a aceptar esta verdad, ya que hiere nuestro orgullo. Enséñanos a recibir gratuitamente tu gracia, tu amor misericordioso, así como la ayuda y el amor de nuestro prójimo. Sálvanos y líbranos de nosotros mismos y del pecado por la gracia de Jesucristo nuestro Señor. Amén.”

footer-logo
Translate »