28 de febrero: Palabra-En-Acción

Dios proclama su palabra al pueblo de muchas maneras: primeramente, con su “palabra-en-acción,” es decir, sus intervenciones y obras salvadoras. En segundo lugar, sus palabras escritas en la Biblia. Y sobre todo, Dios nos habla y proclama su Palabra-Viva, Jesucristo.

La palabra de Dios puede oírse realmente y encontrar resonancia eficaz solamente cuando toma carne y sangre – cuando se “en-carna” –  en la vida de la persona y vibra con pensamiento y sentimiento humanos. Si es así, uno puede responder a ella con palabras orantes de reconocimiento y gratitud, y con la oración-hecha-vida de las buenas obras.

La Cuaresma nos está recordando que la oración es nuestro eco a la palabra de Dios, y lo mismo son nuestras buenas obras. A la palabra de Dios respondemos, en oración y en acción, con nuestra palabra a Dios.

Oremos. “Señor Dios nuestro, tú nos proclamas tu poderosa palabra para nuestro bien, pero no podemos decir que de verdad la oímos, si no sacude nuestras vidas y es proclamada en clave humana. Sigue tú, Oh Dios, hablándonos con tu palabra, y abre nuestros corazones a ella, para que produzca fruto en nosotros cuando hacemos tu voluntad y llevamos a cabo aquello para lo que hemos sido enviados. Te lo pedimos por medio de la Palabra Viviente, el Verbo Encarnado, tu Hijo Jesucristo, nuestro Señor. Amén.”

footer-logo
Translate »